En el futuro, delfines, marsopas y ballenas dejarán de quedar atrapados en artes de pesca: ése es nuestro objetivo
En el futuro de nuestros océanos, delfines, marsopas y ballenas ya no quedarán atrapados en artes de pesca: ese es nuestro objetivo. El enredo en redes y aparejos de pesca se conoce como «captura accidental» y es la mayor amenaza para delfines, marsopas y ballenas en el planeta hoy en día.
Nadie, incluidos los pescadores, quiere que estos animales sufran de esta manera.
Se calcula que cientos de miles de delfines, marsopas y ballenas mueren cada año en las artes de pesca. Esto es inaceptable.
Para un modelo de pesca más responsable, el riesgo de que una ballena o un delfín quede atrapado en las redes debería ser tan bajo que sólo se tratara de un trágico accidente muy poco frecuente.
¿Por qué estos animales marinos tienen dificultades para evitar las redes de pesca?
Lo que resulta aún más desconcertante es por qué los delfines y las marsopas, que se mueven y comunican gracias a sus sofisticados sistemas biológicos, tienen tantas dificultades para detectar y evitar las artes de pesca.
Hay varias teorías que podrían responder a esta pregunta, y es probable que todas tengan su parte de responsabilidad.
Un delfín que persigue a un pez e intenta atraparlo en una red, o que simplemente se acerca por curiosidad, puede ser capturado accidentalmente. Se sabe que los delfines persiguen a los peces atrapados en redes o anzuelos.
Tal vez lo consigan la mayoría de las veces y hayan aprendido que la recompensa merece el riesgo. Sin embargo, no siempre lo consiguen, y es entonces cuando se enredan o quedan atrapados.
También pueden distraerse cuando buscan comida, socializan o juegan. Un delfín distraído puede enredarse en las artes de pesca.
También puede caer en una red mientras duerme. De hecho, cuando un delfín está dormido, su capacidad de ecolocalización puede verse reducida, lo que explicaría por qué no detecta las redes.
El enredo accidental también puede deberse al hecho de que los delfines no «ven» las redes. Los delfines y las marsopas utilizan la ecolocalización para descifrar su entorno. Emiten chasquidos de alta frecuencia que crean ondas sonoras.
Cuando las ondas sonoras chocan contra un objeto y rebotan, los delfines captan los ecos y crean imágenes acústicas de su entorno.
Algunas pesquerías utilizan redes de malla muy fina que los delfines pueden tener dificultades para detectar. Puede ser que estos materiales no produzcan eco y que los delfines y las marsopas se desplacen hacia ellos «a ciegas», sin detectar su presencia. O tal vez puedan detectar las redes pero no perciban el peligro.
Cada muerte de cada ballena o delfín importa
Los delfines, las marsopas y las ballenas son criaturas inteligentes, sociables, sensibles y apegadas a sus familias.
Morir en las artes de pesca es aterrador y espantoso. La muerte por heridas sufridas durante los intentos de escape o por inanición puede ser lenta y dolorosa. Incluso cuando la muerte es más rápida, por asfixia, no se puede controlar la duración de la agonía.
El individuo sufre durante más tiempo del permitido para los animales en los mataderos.
Cuando un delfín, marsopa o ballena se enreda en una red de pesca, también puede tener repercusiones para las crías que dependen de él y otros miembros de su familia o grupo. Cuanto más sabemos sobre las culturas y sociedades de ballenas y delfines, más claro queda que la captura accidental no puede evaluarse únicamente con criterios cuantitativos.
Una población puede parecer sana si se tiene en cuenta el número de individuos que la componen. Si hay más nacimientos que muertes debidas a la captura accidental, puede parecer sostenible.
Pero estas cifras no tienen en cuenta en absoluto el papel de los individuos dentro de los grupos y las poblaciones.
¿Y si la ballena que muere tras pasar meses enredada en una red de pesca es la matriarca que tiene todos los conocimientos sobre los mejores lugares para encontrar comida? ¿O si el delfín que muere en la red de arrastre es una madre cuya cría ha sido abandonada?
Las capturas accesorias arruinan vidas. Los consumidores quieren saber que los alimentos que consumen no han implicado sufrimiento. Los pescadores no quieren capturar delfines, y la industria pesquera debería estar sujeta a un deber de cuidado para prevenir estos accidentes.
Las tecnologías emergentes, como el control electrónico, deberían permitir una mayor transparencia en la pesca, y el verdadero alcance de las capturas accesorias y el sufrimiento que causan quedarán mucho más claros.
Los cambios previstos también beneficiarán a quienes trabajan en la industria pesquera gracias a la mejora de las condiciones de seguridad.
Las artes de pesca alternativas pueden ser una solución; por ejemplo, sustituir las redes por trampas puede reducir considerablemente las capturas accesorias en determinadas regiones, como el Mar Báltico, donde las marsopas están en peligro crítico de extinción. Los mecanismos existentes también pueden hacerse más seguros para las especies «no objetivo».
Una gestión inteligente también puede alejar a los buques pesqueros de hábitats importantes y otras zonas durante periodos delicados, como el parto.
Cada muerte es una tragedia que podemos evitar.
La mayoría de las capturas accesorias se producen en artes de pesca activos. No olvidemos que las capturas accesorias no se controlan ni notifican adecuadamente, y que existen muy pocas medidas eficaces para reducirlas.
Por ello, pedimos a los gobiernos de todas las naciones pesqueras que aprueben leyes y tomen medidas para exigir el seguimiento, la prevención y la reducción significativa de las capturas accesorias. Esperamos que la obligación de evitar las capturas accesorias se convierta en la norma en todas las pesquerías.
Estamos trabajando con socios de la industria y fabricantes para modificar los equipos de pesca con el fin de reducir los riesgos. Varias campañas de ONGs han presionado a los funcionarios para que tomen medidas. Proporcionamos conocimientos especializados a las partes interesadas e informamos al público sobre posibles soluciones.
Conviene recordar que los aparejos de pesca son ahora más resistentes y duraderos que nunca.
Antes fabricados con fibras naturales, la mayoría de los equipos se desarrollan ahora con polímeros plásticos menos costosos pero más resistentes.
Puede que los delfines lleven cientos de años enredados en los aparejos de pesca, pero antes eran capaces de liberarse de cuerdas y redes de fibra natural más débiles. Para un delfín o una marsopa es casi imposible liberarse de las nuevas redes de plástico.
Aún queda mucho camino por recorrer, pero esperamos que los avances tecnológicos hagan que los artes de pesca sean más detectables por delfines y marsopas. En algunas zonas, los pingers o repelentes acústicos están resultando eficaces para alejar a las marsopas de las redes de enmalle mediante la emisión de pitidos. Los científicos están probando el impacto del uso de redes más finas, más fáciles de romper.
Comer pescado de forma responsable
Elija con cuidado para evitar productos procedentes de pesquerías con más probabilidades de capturas accesorias. Aunque los productos del mar lleven una etiqueta de certificación ecológica (como Marine Stewardship Council o Dolphin Friendly), esto no significa que no se haya matado a ningún delfín.
El método de pesca más seguro es la pesca con caña, o pesca a mano: peces como el atún, la caballa y otras especies se capturan utilizando una caña de pescar manual. Este método tiene el menor impacto en las especies no objetivo. Estas pesquerías no están exentas de capturas accesorias, pero rara vez se capturan delfines y, cuando se hace, se les libera vivos.
– Participa en la limpieza de una playa local, ¡o inicia la tuya propia! Cada trozo de basura, cuerda o red que se retira de la costa y sus alrededores representa un peligro menos para la fauna marina. Si no puedes retirarla, al menos corta los lazos, ya que son especialmente peligrosos.
– Comenta el tema con tus amigos y familiares y comparte tus preocupaciones.
– Apoye a las asociaciones y ONGs en el trabajo que está realizando con los pescadores y los responsables de la toma de decisiones para desarrollar nuevos tipos de equipos y adoptar nuevas normativas, o suscríbase a nuestro boletín, donde le mantendremos informado de nuestras campañas y solicitaremos su apoyo cuando pidamos medidas más estrictas para proteger a las ballenas y los delfines.