El océano alberga arrecifes de coral, la cadena montañosa más larga del mundo, fosas oceánicas y más de 220.000 especies conocidas. También alberga entre 75 y 199 millones de toneladas de plásticos contaminantes. Para preservarlos, se necesitan cambios urgentes.
Para 2040, si no se realizan cambios urgentes, la contaminación plástica que fluye hacia el océano puede aumentar de aproximadamente 11 millones de toneladas métricas al año hasta 37 millones de toneladas métricas al año.
En el informe llamado “De la contaminación a la solución y Ahogarse en plásticos“, se subraya la necesidad urgente de hacer frente a la grave amenaza de los desechos marinos y la contaminación por plásticos.
El problema que describen estos informes es claro: los desechos marinos y la contaminación por plásticos ponen en peligro la salud humana, de la fauna y de los ecosistemas.
La basura, la mala gestión de los flujos de residuos y los fenómenos extremos como las inundaciones, que aumentan debido al cambio climático, incrementan la cantidad de desechos plásticos que acaban en el océano.
Esto también tiene ramificaciones económicas, ya que el océano genera 2,5 billones de dólares en bienes y servicios al año y contribuía a 31 millones de empleos directos a tiempo completo antes de la pandemia de COVID-19.
Distintos programas internacionales contra la contaminación en el planeta abordan este problema de contaminación desde la fuente hasta el mar, abarcando todos los sistemas: terrestre, de agua dulce, fluvial y estuarino, costero y de alta mar.
También se centra en las fases de diseño, producción y consumo de la gestión de residuos.
Una pila de botellas de plástico y otros residuos flota en la orilla de un río lleno de algas.
Los ríos son una vía habitual de entrada de residuos plásticos en el océano, por lo que identificar los puntos conflictivos puede dar forma a una política más firme.
De la fuente al mar: océanos limpios
A través de la campaña Mares Limpios, se sensibiliza e impulsa medidas políticas y legislativas sobre la cuestión de los desechos marinos y la contaminación por plástico.
La campaña involucra a los gobiernos, el público en general, la sociedad civil y el sector privado para fortalecer los planes de acción eficaces sobre los desechos marinos y la contaminación por plástico. Actualmente, 63 países son signatarios de Mares Limpios.
Partiendo del enfoque inicial de la campaña sobre los plásticos de un solo uso y su eliminación, 2.0 se centra en comunicar las causas profundas asociadas a la producción, uso y eliminación de plásticos innecesarios, evitables y problemáticos.
Sus áreas temáticas abordarán una serie de productos, como envases, artes de pesca fantasma, neumáticos y textiles.
A través de esta perspectiva, Mares Limpios adoptará un enfoque basado en pruebas para identificar las fuentes, vías y peligros clave de la contaminación marina por plásticos, con el fin de galvanizar el impulso mundial para la urgencia y la acción.
De los 11 millones de toneladas de plásticos contaminantes que llegan al mar cada año, 2,7 millones proceden de los ríos.
La hoja de ruta de Mares Limpios 2.0 hace hincapié en el enfoque de la fuente al mar.
El proyecto utiliza tecnología punta para identificar el origen de la contaminación plástica en los sistemas fluviales de Asia, principalmente en el Ganges y el Mekong. Mediante una combinación de ciencia ciudadana, imágenes de drones, aprendizaje automático y análisis geográficos, el proyecto recopila datos e identifica los puntos conflictivos de residuos plásticos.
Estos datos se comparten con organizaciones asociadas y gobiernos de toda la región, que integran las conclusiones en campañas, legislación, protocolos y sesiones de formación para funcionarios y autoridades locales.
Se ha investigado mucho sobre los desechos plásticos en el océano, pero hay menos información sobre la contaminación por plásticos en los ríos, sobre todo en Asia. Al reunir esta información y facilitar a los responsables políticos, se está informando las políticas a nivel local, regional y mundial.
La ciencia ciudadana es un aspecto fundamental de la Iniciativa. Y por supuesto, incluye los rios que van hacia el mar también.
El río, que suministra cientos de miles de millones de galones de agua a industrias clave y agua potable a 20 millones de personas, es también el sistema de drenaje del 40% del territorio continental de Estados Unidos por ejemplo.
Los residuos plásticos viajan a través de desagües pluviales y vías fluviales más pequeñas hasta el río, llegando finalmente al Golfo de México y al océano.
Tener datos sobre ello deberían ayudar a llamar la atención sobre las concentraciones de residuos plásticos en zonas concretas.
Los desechos marinos y la contaminación por plásticos son problemas procesables. Al abordar desde la fuente hasta el mar, se fomenta una acción gubernamental más fuerte y el compromiso de la industria en todo el ciclo de vida de los plásticos, lo cual es necesario para resolver este problema.