El cambio climático está provocando una subida del nivel del mar sin precedentes. De acuerdo con un reciente informe realizado por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio estadounidense (NASA), millones de personas que habitan en los países insulares del Océano Pacífico podrían padecer las consecuencias debido a la aceleración de este fenómeno que ha provocado el cambio climático.
El estudio predice que países como Tuvalu, Kiribati y Fiji tendrán un incremento de (por lo menos) ¡15 centímetros! en sus niveles de agua costera en los próximos 25 años. Pero la mayor alarma de parte de los expertos tiene que ver con que, este aumento, solo representaría el inicio de una crisis que podría acabar con la estabilidad de estas naciones de forma irreversible.
Por otro lado, el informe del equipo de cambio del nivel del mar de la NASA resalta que esta subida no tiene marcha atrás, y que se dará incluso si ahora mismo se comienzan a tomar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto quiere decir que, lamentablemente, para muchas de las áreas costeras de estas naciones es demasiado tarde. Lo que no quiere decir que, si no se pone un freno a las actividades contaminantes, queden cada vez más expuestas a fenómenos de inundación y a otros efectos derivados del cambio climático.
La directora de los programas de física oceánica en la División de Ciencias de la Tierra de la NASA, Nadya Vinogradova Shiffer, también destacó que en el futuro inmediato las comunidades costeras de estos países necesitarán información precisa para poder anticiparse a los impactos del agua adaptando sus estructuras para evitar catástrofes.
La subida del nivel del mar que puede hacer desaparecer a las islas del Pacífico
Según el estudio de la NASA, para el año 2050, comunidades enteras de países como Tuvalu y Kiribati podrían enfrentar inundaciones de marea alta de forma frecuente y continua. Hoy en día estas áreas suelen experimentar solo algunos días de inundación al año. Pero se prevé que para mitad de siglo padezcan esta clase de catástrofes ambientales ¡durante más de 50 días al año!
Las proyecciones del equipo muestran que ciertas regiones que actualmente no lidian con este problema podrían llegar a vivir con el agua de mar invadiendo sus territorios de forma constante. Los expertos explican que esto será consecuencia de un fenómeno conocido como “mareas reales”, en las que las mareas excepcionalmente altas inundan la costa sin necesidad de que exista una tormenta previa.
Esto no solo traerá pérdidas materiales a estos países, sino que directamente pone en riesgo su existencia, ya que el agua salada que penetra en el subsuelo de las islas irá afectando el acceso al agua dulce de forma paulatina. Sin este recurso indispensable para la vida diaria y la agricultura, los habitantes de estas islas se verán obligados a migrar a otras regiones, dejando atrás sus hogares, su cultura y sus formas de vida tradicionales.
La importancia de las herramientas tecnológicas para crear mapas de inundación
Tal vez una de las innovaciones más importantes de este estudio tenga que ver con la creación de mapas de alta resolución que identifican los lugares más vulnerables de las islas del Pacífico. Los científicos de la NASA colaboraron con la Universidad de Hawái, la Universidad de Colorado y Virginia Tech, para producir estos mapas detallados para Tuvalu, Kiribati, Fiji, Nauru y Niue.
De esta forma buscan ofrecer a los gobiernos locales y a las comunidades un recurso visual para comprender mejor qué áreas enfrentarán los mayores riesgos en el futuro cercano. Los mapas permiten ver cómo repercutirá el agua en cada país bajo distintos escenarios de emisiones de gases contaminantes.
Miembros de organizaciones ambientalistas como Greenpeace vienen luchando para que los gobernantes de estos sectores más afectados utilicen estos recursos para orientar sus decisiones en políticas de infraestructura y mitigación. Así podrán determinar mejor dónde invertir sus recursos hoy para crear barreras protectoras que contribuyan a atravesar un futuro que, desgraciadamente, ya está escrito.
Todo puede ser peor
Para los habitantes de estas naciones insulares, el estudio de la NASA representa una advertencia de la gravedad del cambio climático. A menos que el planeta se comprometa a detener las emisiones de gases de efecto invernadero, el aumento de las temperaturas globales y el derretimiento de los polos no harán más que acelerar el proceso de subida del nivel del mar.
Para las comunidades costeras de estas islas, que dependen del turismo y la pesca como principales fuentes de ingresos, esto significará la desaparición de sus playas y la disminución de su biodiversidad marina. Y en consecuencia, la pérdida de sus medios de vida. A su vez, esto las dejará sin los recursos necesarios para adaptarse a la crisis climática. Solo hay un modo de detener esta bola de nieve: que los países responsables de las mayores emisiones asuman su responsabilidad, detengan sus emisiones y ofrezcan ayuda financiera y tecnológica a estas comunidades.