Los organismos y referentes que apuntan a reforzar la importancia de la pesca sostenible en distintos lugares del mundo. Las especies amenazadas y lo que dicen las voces autorizadas al respecto.
La pesca sostenible avanza cada vez más, pero, a su vez, parecería que no es suficiente. Por eso cada vez hay más iniciativas para lograr concientización sobre la relevancia de instalar formas más amigables con el medio ambiente.
Pero ¿De qué hablamos cuando decimos pesca sostenible? Se trata de capturar solo la cantidad de peces indicada para que queden los suficientes ejemplares en el mar de forma tal que la reproducción de las especies no se interrumpa.
Lo contrario a esta modalidad es la sobrepesca que tiene que ver con retirar de forma indiscriminada especímenes sin límites ni restricciones.
Por otra parte, la pesca sostenible incluye la consideración de las particularidades de cada entorno. Esto quiere decir respetar la biodiversidad y los ecosistemas en el mar.
Cuando se practica la actividad evitando todo tipo de impactos ambientales y agresión innecesaria a la naturaleza, entonces se trata de una pesca sostenible.
Con los consensos necesarios, en muchos puntos geográficos del planeta ya se han extendido las normativas al respecto. Por cierto, existen legislaciones y protocolos.

Sin embargo, en muchos aspectos aún es necesario reforzar la conciencia y las buenas prácticas marítimas.
Es por eso que muchos organismos y entes especializados invitan a conocer como es la pesca sostenible y por qué es tan importante para el medio ambiente.
ONU promueve la pesca sostenible para preservar el atún
En el contexto del Día Mundial del Atún Naciones Unidas aprovechó la fecha para hablar de pesca sostenible.
Ocurre que esta variedad es muy solicitada para su comercialización, lo cual tiene que ver con su alto valor nutricional y sus especiales cualidades para la gastronomía.
Justamente por tratarse de un pez tan importante para la salud de los seres humanos y para las economías nacionales, es imprescindible cuidarlo para que no desaparezca.
Si bien esta especie abunda en los océanos Atlántico, Pacífico e Indico, hoy es víctima de la sobrepesca. La fuerte demanda a nivel global lo convirtió en una de las variedades más buscadas. Sobre esto, ONU ofrece datos elocuentes:
- En el presente el 90 por ciento del comercio del atún proviene de la sobrepesca
- Esta cifra aumentó un 25 por ciento desde 2017 hasta el presente.
- El tipo más afectado es el atún rojo, oriundo de Inglaterra el cual estuvo desaparecido por años y se encuentra de regreso gracias a la pesca sostenible en la zona
- Según el organismo en los sectores en los cuales se vieron avances el factor clave es la vigilancia

En relación a la contención de la sobrepesca la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, también conocida como FAO, diagramó un plan. Se trata del programa Océanos Comunes que apunta a recuperar el control de las áreas más afectadas.
En concreto, la campaña se concentra en ofrecer información, educación y orientación para que la pesca sostenible pueda ser una realidad sin necesidad de controles estrictos.
Pesca sostenible también para proteger a los langostinos
En el sur de Argentina, el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero, también conocido como INIDEP comenzó un nuevo proyecto para evitar la sobrepesca de langostinos.
Para llevar adelante las acciones se puso en marcha un buque pesquero con un grupo de científicos especializados del ente. El propósito es evaluar el comportamiento de esta especie y verificar el estado de situación en el océano.
La primera campaña se llevó adelante durante el mes de febrero en un ciclo de 20 días en un perímetro trazado previamente para tal fin.
El contexto de este esfuerzo marítimo es una inversión conjunta entre distintos sectores privados. En concreto, las mismas empresas que explotan la industria del langostino fueron las principales interesadas en obtener información fidedigna para conocer las condiciones actuales.
En este caso, como en tantos otros, tanto la ciencia como los principales actores comerciales entienden que la pesca sostenible es el camino a seguir para que la industria continúe. Se trata de una cuestión ambiental pero también del propio cuidado de la fuente de trabajo de miles de personas.