Las Islas Galápagos, ese archipiélago ecuatoriano que ha cautivado la imaginación de naturalistas y exploradores desde tiempos inmemoriales, se alza como la primera parada de la nueva expedición 2024 de Greenpeace a bordo del barco Arctic Sunrise. Este viaje, que busca documentar la biodiversidad de este oasis natural y abogar por su protección, nos recuerda la importancia de preservar los tesoros naturales que aún nos quedan en el planeta.
Un laboratorio natural de la evolución
Galápagos, con su fauna ancestral de tortugas gigantes, iguanas marinas, tiburones y ballenas, entre otras especies únicas, no solo es un paraíso natural de belleza incomparable, sino también un laboratorio natural que inspiró la Teoría de la Evolución de Charles Darwin. Desde 1998, la zona goza del estatus de Reserva Marina, un modelo de protección marina que ha permitido la conservación de la riqueza natural de las islas.
Un éxito en la conservación de la biodiversidad
La colaboración entre Greenpeace, organizaciones aliadas, universidades y científicos en esta expedición tiene como objetivo documentar la extraordinaria biodiversidad de Galápagos y promover su conservación. El trabajo conjunto de estos expertos permitirá evaluar el impacto de la protección marina en la zona y desarrollar estrategias para fortalecerla.
Más allá de Galápagos, la amenaza de la pesca industrial en el Pacífico
Tras su paso por las Islas Galápagos, la expedición del Arctic Sunrise se dirigirá a Colombia para impulsar la protección del Pacífico tropical colombiano. Sin embargo, una grave amenaza se cierne sobre esta zona: la pesca industrial.
Devastación de la vida marina y peligro para las especies en peligro de extinción
Las vastas zonas oceánicas que se encuentran fuera de las reservas marinas quedan vulnerables a la actividad pesquera industrial, que devasta la vida marina y pone en peligro la supervivencia de numerosas especies, incluyendo aquellas en peligro de extinción. La sobrepesca en aguas adyacentes a la Reserva Marina de Galápagos también podría tener consecuencias nefastas para la vida marina dentro de la reserva.
Arctic Sunrise en acción
Greenpeace Colombia hace un llamado urgente a la acción para proteger el Pacífico. La ratificación del Tratado Global de los Océanos por parte de los gobiernos de Ecuador, Colombia, Costa Rica y Panamá es un paso crucial para crear zonas protegidas en alta mar y cerrar estas aguas a la pesca industrial.
Imaginar un océano rebosante de vida marina no es una utopía. Cubrir el océano mundial de zonas protegidas podría lograr recuperar y restaurar gran parte de la vida marina que hoy está en peligro. La decisión está en nuestras manos.
Unirse a Greenpeace en la lucha por la protección de los océanos, apoyar las acciones de la organización y difundir el mensaje son acciones que todos podemos tomar para asegurar un futuro sostenible para las generaciones venideras.