Primer plano de un pez cabeza de serpiente (Channa argus), con su distintivo rostro reptiliano y escamas brillantes bajo el agua.
El pez cabeza de serpiente del norte, captado en detalle. Esta especie invasora ya ha generado alertas ambientales por su capacidad de respirar fuera del agua, desplazarse en tierra y alterar gravemente los ecosistemas.

Mitos y verdades sobre la invasión de peces extraños en Estados Unidos

Las verdaderas razones de las alertas por la invasión de peces extraños en el país del norte. Cuán potencialmente peligrosa es esta especie, sus características y las medidas preventivas que tomaron las autoridades 

De forma reciente se dio una alerta en Estados Unidos por una invasión de peces extraños. Pero ¿A qué nos referimos con la clasificación de peces extraños?

Se trata del pez cabeza de serpiente del norte cuyo nombre científico es Channa Argus. Su verdadero origen es Asia y sus rasgos responden a su nombre: tiene cabeza de reptil y un tamaño prominente que puede llegar a un metro de extensión. 

Lo más sensacional de estos peces es su capacidad de respirar fuera del agua y de desplazarse de modo terrestre, incluso por muchas horas o días. Así se los puede encontrar buscando otras cuencas y de esa forma se trasladan de un hábitat a otro. 

Esta invasión de peces extraños se da en agua dulce, de donde el Chann Argus es oriundo, tanto ríos como lagos. 

Lo que sucede en este caso, como en tantos otros, es que al ser una variedad extraña a los hábitats en los que fue encontrado representa un peligro. 

Ocurre que, según advirtieron las autoridades, muy rápidamente se pueden convertir en depredadores de otros seres vivos. Además, por su capacidad de resiliencia a condiciones climáticas adversas, puede sobrevivir mucho más que cualquier otra especie aún en situaciones extremas. 

¿Cuándo comenzó la invasión de peces extraños en Estados Unidos? ¿Cuáles son las regiones en las que pudo ser visto? ¿Qué amenazas representa y qué advertencias lanzaron las autoridades hacia la comunidad?

La historia de la invasión de peces extraños

Lo primero que hay que decir sobre la invasión de peces extraños es que fue visto por primera vez en Maryland en el año 2002. 

Un dato trascendental de esta historia es que la irrupción de esta especie en Estados Unidos no fue casual, sino que todo apunta a la introducción a través de la actividad humana. 

Según el Servicio Geológico de Estados Unidos la responsabilidad le cabería a acuarios o al comercio ilegal. 

En los años sucesivos su presencia se extendió a otros estados como Pensilvania, Arkansas, Misuri, Nueva Jersey y Nueva York. Puntualmente fue en Misuri que en 2019 se divisó en un canal de drenaje y luego su expansión se convirtió en irrefrenable. 

Los expertos afirman que el pez cabeza de serpiente es agresivo, voraz y muy peligroso tanto para otras variedades animales como para los seres humanos. 

Si bien su alimentación se basa en crustáceos y pequeños organismos, bien puede ingerir a otros eslabones de la cadena alimenticia. Esto, desde luego, puede generar un gran desequilibrio en los ecosistemas. 

A los peligros que significa su presencia fuera de su espacio natural se le suma su gran capacidad de sobrevivir a todo tipo de situaciones. Por supuesto, esto incluye su posibilidad de reproducción permanente. 

En concreto, la invasión de peces extraños incluye un panorama de animales con opción de desovar hasta 50 mil huevos en escasa cantidad de semanas. 

Así las cosas, las autoridades decidieron difundir medidas extremas para intentar controlar la emergencia. Así fue que se dio aviso a la comunidad de pescadores que deben sacrificar a estos peces en caso de lograr capturar alguno y lo deben hacer de inmediato. 

Además, desde luego, se dio prohibición total a cualquier tipo de comercio y traslado. Más sí se dejó a libre consideración el consumo de su carne de la cual se han divulgado sus cualidades culinarias. 

También se difundió información con imágenes y videos de las características de estos especímenes para que puedan ser rápidamente identificados. Por cierto, estos mensajes están orientados principalmente a los pescadores, pero bien valen para toda la población. 

La idea incluye poder diferenciarlos de otras variedades nativas con las cuales se los puede confundir y la idea es que esto no suceda ya que a ellas sí se las quiere conservar. 

Por fin, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos propuso una campaña. La misma consiste en invitar a los ciudadanos para que envíen fotos y videos en caso presenciar la invasión de peces extraños. 

No cabe dudas que toda esta situación se trata de una anomalía totalmente fuera de lo común. Es lo que sucede cuando el ser humano interviene en la naturaleza sin los criterios ni la responsabilidad correspondientes.