Tiburón de arrecife nadando en aguas tropicales, representando especies vulnerables amenazadas por la sobrepesca y la destrucción de arrecifes de coral en Belice.
Tiburón de arrecife del Caribe, una especie amenazada cuya recuperación en Belice se logró gracias a la colaboración entre pescadores, científicos y ONG ambientalistas.

El novedoso proyecto para salvar a tiburones de arrecife del Caribe

En qué consiste el plan para proteger a los tiburones de arrecife que se encuentran en peligro en Belice. Las características de la especie y los otros proyectos del mundo con similares características. 

Los tiburones se encuentran en peligro en distintos océanos del mundo por muchos motivos. En Belice durante una década completa se verificó una situación severa de sobrepesca y las comunidades decidieron actuar. 

Para poner manos a la obra se sumaron los grupos de pescadores característicos de la zona quienes manifestaron su interés genuino por la fauna marina. 

En concreto fue entre 2009 y 2019 cuando la iniciativa se gestó. Sin embargo, los efectos continúan hasta hoy. Sucedió que, en ese momento, los expertos determinaron que era imprescindible crear zonas protegidas para que los tiburones de arrecife no lleguen a la instancia de peligro de extinción. 

Al llamado de alerta de los científicos que dieron cuenta de la gravedad de las condiciones se plegaron los trabajadores de la pesca local. Además, hubo otro pilar clave que fue el aporte de la organización Fishers4Science, una ONG ubicada en la región con amplia experiencia en biodiversidad en los océanos. 

Con un equipo conformado en 2021 y el objetivo de dar resguardo a los tiburones se establecieron perímetros restringidos para la pesca. Los mismos estuvieron ubicados en los tres atolones de Belice, los anillos que son el hábitat natural de estos animales. 

Los resultados de las tareas colaborativas superaron las expectativas de todos. Tanto los investigadores como los ambientalistas rescatan la experiencia positiva de la incorporación de los pescadores, quienes sumaron con sus conocimientos de años en el territorio. 

Si bien el proyecto puntual finalizó, la ONG continúa con un seguimiento continuo para evaluar como evolucionan los tiburones de arrecife. Además, la cultura de salvar a los animales dejó su huella y se reforzó la importancia de pesca sostenible entre la población. 

Acerca del tiburón de arrecife del Caribe

Los tiburones de arrecife son típicos del Caribe y la especie de mayor volumen y peso de Belice. Esta variedad supo estar incluida en la lista de animales en peligro de extinción por dos motivos centrales. 

Por un lado, durante mucho tiempo fueron víctimas de la pesca descontrolada sin criterios sustentables. En otro orden de cosas, la destrucción de los ecosistemas de arrecifes de coral son un problema para su existencia. 

Es justamente a causa de su gran tamaño que la especie es una de las más buscadas en los alrededores de Belice para su captura. Esto, sin dudas, se convirtió en la principal amenaza para estos animales, tanto por la pesca legal como por la furtiva. 

Las pruebas fueron contundentes en cuanto a datos y a medidas de control. Tal fue así que la circunscripción de zonas protegidas fue el comienzo del cambio para los tiburones. 

Si bien el puntapié fueron las investigaciones que se realizaron en el año 2022 en una observación marina, la colaboración del Departamento de Pesca de Belice fue vital. Junto con el aporte de los pescadores, el equipo pudo cambiar el destino de los tiburones de arrecife. 

Otros proyectos con pescadores comprometidos

En la zona de Costa Brava, en Cataluña, España los pescadores fueron convocados por la ciencia y los ambientalistas con un objetivo que interpelaba a todos: recuperar los ecosistemas dañados en el fondo del mar. 

Para que esta comunión suceda los investigadores mostraron a los trabajadores la importancia de reparar y sostener el hábitat de los corales. De cara a la protección de los océanos que, además son su fuente de ingreso, los pescadores no dudaron en sumarse. 

Así fue que a lo largo de 30 mil hectáreas se aplicaron técnicas sostenibles mediante las cuales fueron devueltos los organismos marinos para su supervivencia. Para ello, los pescadores recibieron capacitación y las organizaciones no gubernamentales aportaron equipamiento e infraestructura. 

En principio los buenos resultados dejaron conformes a todas las partes. Por otro lado, los sectores participantes reconocieron que se trata de un hecho inédito ya que nunca antes habían logrado unir a actores que, desde siempre, habían estado alejados aún a pesar de necesitarse mutuamente. 

Los casos de los tiburones de Belice como el de los corales de Costa Brava dan cuenta de los buenos propósitos que se pueden generar con uniones nobles para los océanos.